El tránsito entre Estados Unidos e Irán representa para Maryam Keshavarz, directora de este film, un viaje a otro mundo, con sus propias normas, códigos y lenguaje. Una mujer iraní puede ser detenida por mostrar tras el velo parte de su melena, cuestionada por la compañía de un primo varón en público e incluso detenida para inspeccionar los libros y CDs de su bolso. Asimismo, cualquier muestra pública de afecto, ya sea heterosexual u homosexual, se considera inmoral. En Irán, la sexualidad entre personas del mismo sexo es un gran tabú. Se reprime y castiga severamente.
Ante la violación de las libertades personales que especialmente sufren las mujeres, algunas de ellas se atreven a sortear las restricciones. Existe un desconocido universo iraní underground que representa un intersticio para mujeres jóvenes donde explorar el amor a través de diferentes relaciones que pueden llegar a ser estrechas e íntimas, pero siempre vulnerables a la represión.
La organización Iranian Railroad for Queer Refugees, que lucha desde Toronto por el respeto de los derechos homosexuales en Irán, denuncia la dificultad para probar que los castigos infligidos sean por causa de orientación sexual, ya que en estos casos las verdaderas causas se suelen ocultar.
Film: Circumstance