Cultura saharaui

El pueblo saharaui lleva 40 años dividido entre el exilio en los campamentos, la diáspora y la represión cultural, política y social de las personas que viven en el Sahara Occidental ocupado por Marruecos.

Su reivindicación del derecho a la autodeterminación, y de recuperar su territorio arrebatado, ha hecho que mucha gente asocie al pueblo saharaui con los campamentos de personas refugiadas del desierto argelino y que se olviden otros aspectos culturales que caracterizan a este pueblo milenario.

Étnicamente el pueblo saharaui tiene orígenes bereberes, árabes y del África negra; la religión dominante es el islam sunita y el idioma hablado es un dialecto del árabe llamado hassanía. Antes de ser colonia española, su medio de vida principal era el pastoreo nómada de cabras y camellos a través del desierto. Las vestimentas, la música y la poesía también lo distinguen de los países vecinos.

Tanto la colonia española como la marroquí han tratado de acabar con la cultura y tradiciones de este pueblo, pero gracias a la transmisión oral y a una fuerte identidad nacional, la cultura saharaui no solo se ha mantenido, sino que se está abriendo a nuevas expresiones como, en este caso, el cine.